El eterno aprendiz
Paolo Acevedo

¿Qué hace un niño solitario contemplando el mar?
En silencio imaginando otra realidad,
por la senda va sembrando sueños sin cumplir,
de sus huellas nace el canto de los colibríes.
II.
Y se hizo al mar, en un barco de papel fue a navegar,
descubrió la paz, de los hombres que sueñan la libertad,
de la sociedad, incompetente conoció la falsedad,
y en la soledad, el muchacho flageló su humanidad.
I.
Este chico fue creciendo en dura sociedad,
sus sueños fueron muriendo y aprendió a llorar,
las estrellas lo llamaban: 'eterno aprendiz'
y la luna enamorada: 'flor de capulí'.
II.
Aprendió a llorar, en su tierna y mansa cárcel de cristal,
comenzó a forjar, sus canciones sumido en la soledad,
intentó plasmar, el silencio en su voz angelical,
y aquél vendaval, de emociones nunca más volvió a soplar.
I.
Camisita, pelo largo y unos viejos jeans,
su guitarra lo acompaña donde quiera ir,
canta al viento y a las flores de un basto jardín,
en su mundo aquél poeta sueña el porvenir.
II.
Por el boulevard, de los sueños rotos se echó a caminar,
en la oscuridad, se contempla su figura algo espectral,
olvidó volar, y cantar y soñar y fornicar,
en el cielo está aquella estrella que siempre lo alumbrará.
Final:
D·A·G·A