D A Cuando me despierte cada día Bm G con el cuerpo de aire y ese olor D E feliz del sueño manso de las lilas G D sin miedo al movimiento ni al dolor. D A Cuando ya no tenga casi nada Bm G de sangre en la garganta de papel D E y un agrio pez nadando en la mirada G D ni quiera más amparo que la piel. D A Van a ser los días esos barcos C/G G D de luz que una vez supe esscribir Bm A y la alegría que hemos olvidado G D volviendo por los huesos a subir. D A Yo me alimento con una quimera C/G G D en que los ojos al sol verán brillar A G D los brazos de mi padre en las banderas Bm A G Fm7 y una ceniza negra y una ceniza negra Em A D y una ceniza negra que se va. Cuando me convenza que la suerte me rige a la par de la pasión y no el terrible arcángel de la muerte rondando por el campo del terror. Si lo consumado y lo posible tienen siempre la cara del horror en esta patria de lo inaccesible en este tiempo olvidado de Dios. Yo digo que mis ávidos amores son fuertes y viven más que yo son gigantes tenues como flores que alientan a este turbio corazón. Los alimento con una quimera en que los ojos al sol verán brillar los brazos de mi padre en las banderas y una ceniza negra y una ceniza negra y una ceniza negra que se va. Y una ceniza negra y una ceniza negra y una ceniza negra que se va...