DO Tenía los ojos como el maldito diablo, me dijo y después se echó a correr me empezó a doler de a poco la sombra y no paro más de llover. Habíamos tenido unas copas y una dosis del mejor hotel los cuentos no tienen finales tristes gritaba se abandonan sin querer. SOL DO4 DO DO DO4 Un espejo se ha prendido fuego en calma y del dolor pase al placer este mundo no es amable ni prolijo y las esquirlas por todas partes van a caer. En la mentira del olvido y las palabras y el absurdo del poder y creciendo por detrás de las paredes aparece lo mejor de lo peor. SOL FA DO DO4 Bienvenidos, bienvenidos al veneno de la soledad bienvenidos, (pueden venir cuantos quieran), al veneno de la soledad.